Sábado 28 de Marzo. Una noche de esas para recordar... pero que nadie recuerda al día siguiente.
La cena estuvo genial, Nana preparó bolitas de arroz con salmón, había ensalada de pepino y yo hice "pavo-teriyaki". Debía ser pollo, pero no quedaba en el súper así que bueno... hay que decir que no está del todo mal con pavo. Todo ello regado con cerveza del pueblo de al lado, la Apoldaer.
Unas copas y algunas fotos y videos fiestero-nostálgicos más tarde, nos dirigimos al e-werk. La antigua nave industrial que no es una discoteca ni nada, solo un lugar de exposiciones y celebraciones. Y no sé que se celebraba, pero allí todo el mundo estaba muy contento.
Bailamos, charlamos y bien pronto empezamos a conocer fauna de la zona. Música: primero más rollo funk y luego cada vez más electrónica. Entonces llegaron más erasmus de los que ya conocemos. Estaba allí casi todo el mundo, todos más o menos igual de finos que el resto. Y así, entre ambientes de humo de tabaco y sudores un tanto etílicos, pasó la noche entre bailes y conversaciones estrambóticas. Con bretzels del suelo incluidos.
Sí, echaré de menos las fiestas erasmus...
miércoles, 1 de abril de 2009
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2 comentarios:
Ummmmm!!bretzels!!! al teu pare li encantan!!!! estaria bé que en portesis un!!!!XDDDD
Esa foto, ese Bretzel.
Mi cabeza
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